Pagos con el móvil, ¿qué debo saber?

Los pagos a través del móvil se han vuelto omnipresentes. Según los últimos datos, el mercado mundial de pagos móviles se valoró en 1,18 billones de dólares en 2019 y se prevé que crezca a 8,94 billones de dólares en 2027.

La popularidad de los pagos móviles se ha visto impulsada por la adopción de teléfonos inteligentes, las redes de datos móviles de alta velocidad y el crecimiento de comercio electrónico.

¿Qué son los pagos con el móvil?

La definición de pago con móvil es cualquier uso de un dispositivo electrónico portátil (tablet, smartphone, smartwatch…) para enviar y recibir dinero. A los pagos a través de móviles también se conocen como transferencia de dinero móvil, dinero móvil o simplemente M-Payment. 

¿Cómo funciona el pago con móvil?

El funcionamiento de los pagos móviles depende de la tecnología subyacente del sistema de pago móvil. Hay muchos tipos de pagos móviles y cada uno funciona de manera diferente a los demás. 

Básicamente, asocian medios de pago del cliente (normalmente una tarjeta bancaria) a diversas tecnologías para realizar el pago, todo ello gestionado a través de una app donde se complementan con servicios e información variados.

Tipos de pagos con móvil

Los tipos de pagos a través del móvil se distinguen por la tecnología o método que usan para transmitir la información del pago y ejecutarlo, ordenarlo, bajo confirmación personalizada del cliente.

Los tecnologías más habituales son NFC, códigos QR, compartición de enlaces o envío de SMS.

Códigos QR

El más extendido probablemente sea el de códigos QR por su versatilidad, ya que pueden ser tanto impresos físicamente como mostrarse virtualmente en la pantalla del dispositivo. Asimismo, son reversibles, dado que los puede generar el vendedor para recibir un pago como el comprador para realizarlo y ser leído por el vendedor. Yendo aún más lejos, su representación permite variaciones que los haga reconocibles sin perder ninguna de sus características de fiabilidad y seguridad.

Un ejemplo habitual de funcionamiento puede ser el de WAYLET de Repsol. En esta app el cliente asocia sus métodos de pago en la app (tarjetas bancarias) y, en el momento de pagar, indica el importe a abonar y el medio elegido, generando un código QR en la pantalla del móvil. La lectura de este código por parte del vendedor y su confirmación por parte del cliente finalizará la transacción con total seguridad.

NFC

NFC es un protocolo de comunicación entre dos dispositivos a menos de 10 centímetros de distancia sin necesidad de contacto que se ha popularizado enormemente ya que está siendo incorporado por defecto en casi todos los nuevos modelos de móviles. 

Su mayor ventaja es la mencionada falta de contacto, la encriptación de los datos transmitidos que le proporciona una gran seguridad y la velocidad con que se realiza. Algún inconveniente puede surgir por incompatibilidades entre versiones de protocolos utilizados entre receptor y emisor, ya que es una tecnología en avance y desarrollo permanente.

Un gran ejemplo de las ventaja de su uso la hemos vivido debido a la pandemia, donde la exigencia de aminorar los contactos la ha hecho muy útil a la hora de realizar pagos cotidianos. Su uso se está popularizando en el pago del transporte público.

Ventajas del pago con móviles

Nos guste o no, el móvil es ya parte ineludible de nuestras vidas. Salir a la calle sin él es cada vez más infrecuente y nos resulta una herramienta imprescindible para gestionar con seguridad nuestros más variados asuntos. Por tanto, la conveniencia de que nos sirva para hacer pagos, prescindiendo del metálico o llevar varias tarjetas bancarias encima en una cartera, es la primera ventaja.

Además, lo hacen con seguridad. Datos biométricos, escaneo de huellas dactilares, 2FA, encriptación, etc. son métodos y tecnologías de todo tipo que evitan suplantaciones y fraudes que nos podías suceder con las tarjetas bancarias, la falsificación de billetes o posibles robos. Esos problemas, desaparecen.

Consecuencia de las anteriores es la eficiencia. Se reduce enormemente el proceso y las esperas del proceso de pago. Y también la versatilidad, ya que el pago con móvil se puede usar tanto en compras físicas como por Internet en cualquier momento y lugar. Y asociarlo al método de pago que más nos convenga en cada caso.

Y de todo lo anterior deducimos la gestión. Administrar los gastos diarios es una tarea importante para todos nosotros y las apps que gestionan los pagos con móviles añaden infinidad de complementos que permiten hacer un seguimiento financiero más detallado, claro y precios.

Y, por último, estarían las promociones y ofertas, ya que esa misma gestión rápida y centralizada permite la aplicación rápida y sencilla de todo tipo de descuentos, acumulación de puntos y fidelizaciones que llevan a cabo las empresas y que nos pueden dar un ahorro extra en nuestras compras.

Apps de pago con móviles

La oferta es amplia ya que las empresas más importantes se han lanzado en facilitar los pagos con móviles a sus clientes y usuarios en un mercado que, como ya dijimos, crece exponencialmente.

Google Pay, Apple Pay, Samsung Pay

Las grandes tecnológicas fueron las primeras en abordar esta solución y sus apps están entre las más populares ya que aprovechan sus mercados y dispositivos para dar su solución por defecto.

Cualquiera de ellas tiene un funcionamiento muy similar: una vez descargada la app, no hay más que añadir al menos una tarjeta para pagos compatible y ya podremos usarla. Todas permiten configuraciones básicas de funcionamiento para adaptarlo a nuestras necesidades, desde límites y pagos mínimos hasta elegir el método de seguridad y confirmación que más nos convenga.

En estos casos, la integración con otros servicios o dispositivos de la marca puede ser determinante para que prefiramos una u otra.

Santander Wallet, BBVA App, CaixaBank Pay

Del mismo modo que las tecnológicas, pero en el otro lado de la ecuación, están los bancos. Los emisores habituales de cobros y pagos están, evidentemente, muy interesados en ser protagonistas de esta revolución financiera y, de este modo, seguir o poder captar más ingresos mientras ofrecen un mejor servicio a sus clientes y usuarios, ya sean particulares o empresas.

En este caso, la integración con servicios financieros de cada entidad que sean útiles al cliente, desde conocimientos de saldo hasta ofrecimientos crediticios rápidos son las principales características de esta apps frente a otras con la misma funcionalidad

Waylet

Destacamos la app de la compañía Repsol como una de las que mejor ha entendido las posibilidades de este nuevo ecosistema de pagos.

Lejos de limitarse a los productos y servicios de la compañía, como el conocido repostaje de combustible y compras en sus tiendas asociadas cuyo pago queda muy mejorado y rápido con su uso, Waylet está incorporando todo una red de establecimientos comerciales donde su app puede ser utilizada para pagar con móvil con la misma capacidad de fidelización, ofertas y descuentos que tiene en los propios, convirtiéndose de este modo en una app imprescindible para muchos usuarios que buscan maximizar el ahorro de gastos cotidianos.

Bizum

No podíamos dejar de mencionar esta app que ha logrado situarse como estándar de los micropagos entre particulares.

Proveniente de un consorcio de todas las entidades bancarias del país, Bizum ha conseguido gracias a una paulatina evolución simplificando su uso, ser la referencia para todo tipo de transferencias de dinero a pequeña escala, desde el típico reparto de pagos en hostelería hasta la resolución de pequeños préstamos, deudas o donativos. «Hacer un bizum» es ya una expresión popular para referirse a ello.

Conclusión

La incorporación de los pagos con el móvil en toda actividad comercial y de la vida cotidiana es algo que, con toda seguridad, vamos a ver en los próximos meses avanzar inexorablemente. Va a ser el adiós definitivo a las tarjetas de plástico como medio de pago, fidelización e identificación y, en gran medida, también del metálico.

Está por ver qué nuevos aportes puede realizar esta tecnología a nuestras vidas haciéndola más sencilla pero, sin duda, donde más aceptación va a encontrar será en modelos abiertos como el llevado a cabo por Waylet, donde una concepción total del fenómeno del M-Payment abriéndose a todo tipo de comercios y programas de fidelización y descuento, e integrándose con otras tecnologías como geolocalización y servicios financieros adicionales, abren una extensa gama de posibilidades de la que pocos usuarios podrán prescindir.