A pesar de las críticas crecientes que recibe la ONU por su cada vez menos peso en el panorama internacional, entre sus objetivos sigue habiendo proyectos muy loables que quieren lograr para los próximos quince años: por ejemplo, acabar con el hambre y la pobreza para lograr la igualdad de género, o terminar con las muertes previsibles de los recién nacidos y niños menores de 5 años de edad.
La Universidad de Huddersfield cuantifican este problema en 2,8 millones de muertes de recién nacidos que se producen cada año, 2 millones de los cuales se llevan a cabo tan sólo en diez países. La tecnología se posiciona como una gran aliada lograr ese objetivo de la ONU y esta Universidad ha presentado su proyecto WAAA!, un sistema de sensor portátil neonatal de bajo coste, que ha sido uno de los diez finalistas del UNICEF’s Wearables for Good Challenge. tiene la particularidad de ser la única finalista del Reino Unido con una participación que recibió 250 propuestas de 46 países.
WAAA! es el original nombre de este wearable que utiliza la escala APGAR para evaluar los signos vitales de los bebés en el primer minuto, hora y día de su vida. APGAR ayuda a los trabajadores de la salud y los padres a controlar la apariencia, el pulso, las muecas, la actividad y la respiración en los recién nacidos para evitar infecciones y neumonía, en particular, causas que se cuentan entre las principales que causan la mortalidad.
Con 40 millones de nacimientos sin atención sanitaria en todo el mundo, este wearable de la Universidad de Huddersfield está tratando de reemplazar la necesidad de formación clínica para manejar las herramientas que monitorizan el pulso y la respiración de los recién nacidos y, lo que es fundamental en estos casos, a un precio extraordinariamente bajo, 38$.